Gloria eterna a los combatientes y mártires de Puerto Cabello.

Por segundo día se combate en Puerto Cabello. Heroica resistencia de los revolucionarios y sangrienta derrota del gobierno en La Alcantarilla
Tal día como hoy, 3 de junio 1962, continuaban los combates en Puerto Cabello (Carabobo) entre las fuerzas rebeldes de la infantería de marina y el destructor Zulia, acompañados de combatientes surgidos del pueblo y de la juventud de Puerto Cabello, contra unidades desplegadas desde Valencia (Carabobo) y Maracay (Aragua) por el gobierno de Rómulo Betancourt.
En los primeros días de la mañana, la Aviación arreció sus bombardeos contra el Fortín Solano y la antena de la Radio Puerto Cabello. En realidad, el Fortín Solano no tenía ningún mérito militar, porque ya había sido desalojado por un numeroso grupo de guerrilleros encarcelados en sus calabozos y liberados por los oficiales revolucionarios. La Radio Puerto Cabello sí era un objetivo porque el movimiento revolucionario transmitía permanentemente llamamientos a la insurrección del pueblo y las Fuerzas Armadas.
Tal como había sido pactado, los rebeldes esperaban el alzamiento de otras unidades, entre ellas los batallones blindados, la Aviación y cuerpos de infantería. Sin embargo, la represión oficial había causado estragos entre la oficialidad comprometida. Numerosos tenientes coroneles, capitanes y tenientes habían sido apresados y neutralizada su incorporación a la rebelión. Las fuerzas del Gobierno, superiores en número y armamento, avanzaron y ocuparon Puerto Cabello sobre numerosos muertos y heridos. En la batalla de la esquina de La Alcantarilla, más de cuarenta muertos dejó la torpe maniobra del coronel Alfredo Monch, quien intentó avanzar con una columna de tanques por las estrechas calles de la ciudad y cayó en una emboscada de los rebeldes.
Ya en los momentos finales del domingo 3 de junio son detenidos el Capitán de Fragata Pedro Medina Silva, el Capitán de Navío Manuel Ponte Rodríguez (quien fuera vilmente dejado morir en prisión) y el Capitán de Corbeta Víctor Hugo Morales, quienes dirigían la rebelión. Ya el lunes 4 de junio los últimos disparos del Puerto Cabello revolucionario retumban para la historia. Se estima en más de 300 los caídos en esta gesta revolucionaria, convirtiéndose en una de las batallas más sangrientas de la historia venezolana. La actitud valiente de esos militares patriotas que se opusieron desde el principio a los crímenes de la falsa democracia del pacto de Punto Fijo es un hecho que la historia debe reivindicar, el respaldo del pueblo de Puerto Cabello a la rebelión militar, el sacrificio de los jóvenes comunistas y los militantes del PCV que con armas en manos combatieron codo a codo con los militares revolucionarios en Puerto Cabello, es parte de nuestro glorioso pasado, así como ejemplo y estímulo para redoblar el trabajo en la Revolución Bolivariana.
Gloria eterna a los combatientes y mártires de Puerto Cabello.